Hay que ser valiente para no conformarse
¿Quedarme o no quedarme? ¿Cuál es mi verdad? ¿Qué decisión encaja conmigo?
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fotografía de Jessica de Lima
Tomar decisiones es de valientes.
Hay quién quizá sienta que lo fácil es quedarse dónde está, no cuestionarse las cosas y ponerse cómodo en una especie de falsa zona de confort. Lo conocido, lo diario, en lo que ya estoy.A mí eso me quema y me es realmente difícil si no me siento bien. Y eso no significa que moverme me sea sencillo y me lance a ello sin cuestionarlo, sin analizar las opciones y sin darle vueltas a la cabeza. Soy Géminis y estudio las cosas en profundidad habitualmente y hay decisiones, muy sencillas que pueden llevarme horas, días o semanas de negociación interna pero no puedo pasar por la vida sin cuestionarme lo que me remueve por dentro ni conformarme.
A veces he pensado que la vida sería mucho más sencilla si me conformara.
Si aceptara ese trabajo de 9 a 17h que me da seguridad y estabilidad.
Si me hubiera quedado con aquella persona que quería formar una familia conmigo a mis 27 años.
Si siguiera instalada en Barcelona en la casa que compré hace años y no siguiera moviéndome por el mundo.
No daría tantas vueltas.
Todo sería más sencillo. Más lineal.
No me supondría tanta energía y desgaste emocional, físico, intelectual…
Pero no sería real… No para mí. Y lo real, aunque haya momentos incómodos, tristes, dolorosos… tiene tantas recompensas también… Es como si pretendiéramos elegir la luz sin experimentar la sombra. Eso no es posible.
Lo real tienes miles de recompensas.
No podemos elegir la luz sin experimentar la sombra.
Para mí no moverme desde lo real sería quedarme en sitios donde no quiero estar.
Sitios que ya no me funcionan.
Y no hay nada de malo en ese “de 9 a 17h” o en esa casa o en esa persona.
Es lo que uno siente respecto a eso en cada momento. Yo no he sabido nunca de conformarme. Y creo que la escucha que he ido cultivando conmigo a lo largo de los años, me ha ayudado a afinar más y hacerme cada vez más caso.
A veces es cansado. Lo juro, lo prometo.
¿Otra mudanza? ¿Otra reinvención? ¿Otro vínculo roto?
Pero surge de dentro mío así, de mis entrañas.
Es mi instinto.
All in, ir a por las cosas
Lo siento y lo hago. Y no es de un día para otro. A veces son temas que se cultivan por meses porque un día alguien me dijo algo y eso se me queda ahí germinando hasta que un día me paro y me doy cuenta de que necesito mudarme, por ejemplo. Que lo que tengo no encaja más con mis necesidades del momento y que hay que hacer movimientos.
Mi terapeuta hace un tiempo me decía que vivo crisis continuamente. Que estoy en constante muerte - resurrección. Y es todo tan rápido que sí vivo crisis (y obvio que eso es molesto) pero rápidamente salgo de ellas y me coloco en mi comodidad. Veo que es cierto. Y eso de algún modo, hace que tenga menos miedo. Porque sabes que pasará. Todo pasa. Incluso lo que más nos duele y nos rompe por dentro.
Hay amigas que me han dicho que soy valiente por los giros que le he dado a mi vida a lo largo de los años y los giros que aún sigo dándole.
Supongo que por eso estoy donde estoy, en el buen sentido y a veces en el no tan bueno, sobre todo algunos aspectos que sigo tratando de colocar.
El tema es que yo no sé hacerlo de otro modo y cuando algo me pica… necesito tomar decisiones.
Admiro a las personas que toman decisiones difíciles
Estos días dos personas importantes para mí tomaron grandes decisiones que me dejaron impresionada y orgullosa. Ambas dejaron sus respectivos trabajos. Él, mi amigo, dejó un trabajo para otros estando muy bien pagado y teniendo absoluta libertad, sin tener un plan B a día de hoy más que algunos ahorros. Mi amiga, dejó su propio proyecto en el que llevaba muchos años trabajando y con gran éxito.
Qué valientes, les dije a ambos.
Y pensé: “Este es el momento, o ahora o nunca. Muévete si lo sientes. Eso es estar vivo. La inactividad nos apaga, nos merma”.
Yo también estoy haciendo grandes movimientos que requieren de valentía. No sé si será que la energía este final de año se está moviendo fuerte pero siento que hay que soltar cosas y no conformarse.
Colocarnos en nuestro lugar y valor
Siento que cuando no estoy alineada ni colocada en mi valor, las cosas no van bien. Lo siento incómodo, no fluye, siento dolor (muchas veces físico además del obviamente emocional), tengo un pesar dentro… Y ahí siento necesario tomarme tiempo conmigo, doblar o triplicar el cuidado personal (de meditación, escritura, yoga, deporte, tiempo a solas…) para escuchar y darme cuenta de lo que va y de lo que no va. Recuerdo algunas ocasiones muy claramente en las que me ha pasado aguantando cosas y luego mi cuerpo ha explotado.
Estos días que estoy soltando y realineándome (siempre hay que hacer ajustes, mayores o menores), la vida asiente ante estos gestos y movimientos y lo hace con muestras de abundancia. Regalándome vida a diario, como contaba en este otro artículo donde compartía todo lo que había manifestado hace un tiempo (y las manifestaciones conscientes siguen llegando).
OTRAS INFORMACIONES DE INTERÉS
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I've always enjoyed reading your "Soul Diaries." Of course, because I don't speak or read Spanish, I need to translate. Today's offering is one I truly like. I've read it several times, and has reached into my soul. I'm sending this to others, in hopes it will resonate with others. I send you prayers and blessings for a brighter Holiday Season, and a peaceful and comforting 2025.