Acompañar a los demás
Qué dar y qué esperar cuándo estamos en procesos de coaching o terapia. Claves, insights y reflexiones al respecto.
Soul Diaries es una suscripción gratuita que consta de dos envíos mensuales pero si amas lo que encuentras por aquí y te apetece ir más profundo, considera hacerte de la versión de pago para acceder a escritos y recursos extras.
También puedes compartir fragmentos de mis textos en redes sociales mencionándome, compartirlo con alguien vía email, y ayudarme. allegar a más personas para que el mensaje llegue a quiénes puedan necesitarlo. Gracias por leer y apoyar.
retrato de mi querida amiga y artista Susan Ross
Hasta hace algunos años, tuve bastantes malas experiencias con los profesionales del mundo terapéutico (psicólogos, terapeutas, especialistas en áreas de la salud) y esto, es decir mucho porque teniendo en cuenta que empecé en la adolescencia a entrar en contacto con ellos, son muchas si hacemos las cuentas…
Ciertamente esos episodios me marcaron. Me sentí en más de una ocasión no escuchada ni atendida, abandonada, no vista… Y no es lo mejor que una puede experimentar en esos ámbitos en los que estás básicamente necesitada de atención y presencia.
Supongo que por ello, tras esas vivencias, cuando alguien se acerca a mí para trabajar conmigo y me hace miles de preguntas, me expresa sus inseguridades, quiere/casi me suplica que le asegure lo que podré hacer por él / ella (cuando yo, nosotros, no somos quienes hacemos las cosas, esto es un espacio de dos, de mí y de la otra persona con una responsabilidad compartida, más abajo te explico lo que puedes esperar de un espacio de terapia o coaching, al menos conmigo para entender un poco más), lo entiendo. Lo entiendo porque he estado ahí. Y quieres asegurarte de que el otro estará, te hará caso, te dará todo lo que esté en sus manos para sacarte del lugar en el que estás… Pero esto no funciona así. Creo que hay que estar, sí, pero uno ha de poner de su parte y comprometerse. En estos ambientes, en estos lugares, el compromiso y la presencia, se pide de ambos lados.
Y mejorar, avanzar, obtener ciertos resultados, pide de tu propio movimiento.
Sé que en esta vida, nos han enseñado a ir siempre tras los resultados. Queremos ver que las cosas salen como queremos que salgan, queremos que se cumplan nuestros objetivos.
Queremos lograr lo que queremos lograr. Así nos han enseñado pero… hay cosas que no se pueden asegurar, que no se pueden saber, que NO PODEMOS CONTROLAR.
Y la clave está en soltar, confiar y entregarse a la experiencia, sea cuál sea.
La actitud en los espacios de acompañamiento
No deberíamos entrar en un proceso terapéutico midiendo cada palabra, cada paso, cada señal o no señal, analizando cada encuentro con el coach o terapeuta o con la práctica en la que estemos.
Así las cosas seguro que no funcionan. No puedes en cada sesión, medir con lupa cómo ha ido y cuánto has avanzado. Qué te ha dicho la otra persona, si tu respuesta ha sido correcta o no, cómo lo sientes por dentro, si ha habido un gran cambio interno…
Así era y estaba yo cuando comencé con la práctica de yoga, lo cuento más en detalle en mi libro Yoga para equilibrar tus emociones.
Tras cada clase quería ver avances en la práctica física, quererme más a mi misma, fluir más con la vida… Y me presentaba en cada clase con exigencia, con rigidez. Hasta que me di cuenta de que así no funcionaban las cosas. Y solté. Solté y me entregué con confianza a la práctica hasta que un día, 6 meses después, tras meses sin pensar en ello, me di cuenta del gran avance que había vivido y experimentado.
Suelta, confía, déjate llevar. En estos ámbitos y en cualquiera de la vida…
Y sé que es tremendamente difícil, es uno de mis desafíos continuos pero poco a poco vas aprendiendo a soltar, a aflojar, a estar menos pendiente, te vas atreviendo a hacer sin esperar resultados, a hacer sin controlar…
Mi experiencia en procesos terapéuticos
Me acuerdo hace no muchos años que una amiga me recomendó a una amiga suya psicóloga. Hice dos sesiones con ella. Ambas fueron buenas sesiones. Me sentí conectada, escuchada… en la sesión. Pero luego, no había sostén fuera de ella. Y voy a aclarar esto porque no siempre lo hay, no todos los profesionales acompañan fuera de sesiones y eso está bien si se marca así desde un inicio pero yo no me refería a ese acompañamiento. Me refiero a responder mensajes míos para concertar las siguientes citas. Recuerdo estar especialmente mal, viviendo una crisis importante, cierto abuso en mi vida que le había expresado y pedir con premura vernos y no tener respuesta de ella hasta semanas después. Me sentí francamente sola y abandonada y obvio que eso tocó mi herida…
Pero cuando empecé a sanar esas heridas, a colocarme en mi lugar, a saber exactamente lo que necesitaba de un proceso terapéutico, a buscarlo, pedirlo, a expresar lo que necesitaba… las personas llegaron (igual que sucede en cualquier área, cuando te colocas en tu sitio, las cosas se alinean; en temas de pareja, trabajo, con la familia…). Sin interferir en el otro o en los otros, colocándote tú primero.
Estos años he tenido la suerte de encontrar a quiénes sí me han acompañado.
Y al ver lo que necesitaba, también me he colocado distinto en mi modo de acompañar a los demás desde que hace unos años decidí ponerme también en esa posición. Eligiendo un tipo de apoyo que va con lo que considero que hemos de dar como profesionales de la salud.
Con límites porque no podemos estar 24/7 disponibles ni atender ciertas cosas por email o teléfono. Pero estar. Estar para la otra persona es importante.
En mi opinión y en mi práctica acompañando a otros, hablamos de esto siempre en nuestro primer encuentro para que ambas personas sepamos dónde estamos, qué esperar del espacio, qué se puede pedir, qué no…
Y esto, no es más que algo que se replica en miles de aspectos de nuestra vida.
Lo que dar y esperar del otro en una amistad, en relaciones, en espacios de trabajo con compañeros o superiores, o nosotros como superiores respecto a personas a nuestro cargo, en nuestra relación con niños, etc etc
¿Qué opinas de este tema?
¿Cómo lo has vivido? ¿Cómo te gustaría vivirlo?
Me encantará saber tu opinión. Te leo por aquí.
Un abrazo, con cariño,
Anna
Mujeres que están en mis espacios
María, Business Mentoring 1:1
“Anna, gracias y gracias, lo que compartes llega y mucho. Y el trabajo que hicimos también. Es tan bonito sentir esa potencia y esa fuerza interna, que pese a los baches y momentos difíciles, te mantienen confiada y segura”
María, sobre Soul Diaries paid
“Seguirte en soul diaries es emocionante, y lo siento tan valioso! Abres tu intimidad y la enriqueces con tus reflexiones, muestras el camino, no siempre fácil, pero con la maravillosa determinación hacia el bienestar propio”
PROPUESTAS PARA TI ACTUALMENTE DISPONIBLES
El otoño es el momento perfecto para reconectar contigo, pasar tiempo reflexionando y llevando la mirada adentro y proponiéndonos nuevas intenciones. Espero verte en estos espacios. Espero que este otoño, cuides de ti.
membresía dentro studio (acceso a todo el contenido te inscribas cuando te inscribas. A partir del día 2, disponible el módulo de Octubre: La Prosperidad
nuevo: proceso terapéutico - 5 sesiones de 60 minutos cada una de ellas. Enfoque terapéutico y psicológico (pack 450€) Únicamente 4 plazas disponibles. Más detalles por email. Inicio éste mes de septiembre.